Umbral

Umbral

Bañándome de sangre e ira
viví la juventud en mi corazón ingenuo
y los ecos del cosmos rebotando contra mi pecho
la sabiduría se vuelve ingenua
construida con ladrillo de excesos y deseos.

La insolencia reclama su discípulo remiso
y el espacio se ve tan tranquilo para pastar,
mientras mi sangre te la bebes en un banquete

realmente duro, y tan fácil.

No hay tierra de dolor y de alegría
solo queda la melancolía y la esperanza
a donde no llegan los borregos ni los lobos
y donde los leones comen la carroña de las hienas
con gusanos quese emborrachan en el Eliseo.

Te conozco muy bien y se quien no eres
conozco tus frases proletarias y tus discursos fascistas
y ahora que no puedes articular palabras
me gustara oír tus gritos de confusión.

Esta es mi vida, este es mi universo
en los balcones del vació
tañendo las campanas de la vida
resignado a mi banal labor de jorobado
¿te agrada el silencio?
bienvenido al umbral.